Cuantos hipopresivos hay que hacer al dia

Ejercicios respiratorios hipopresivos

Los ejercicios hipopresivos fueron enseñados originalmente por Marcel Caufriez como una técnica de respiración para ser utilizada en un entorno clínico. Una herramienta que los terapeutas podían utilizar para ayudar a las mujeres en el posparto a prevenir y/o re-cubrir las disfunciones del suelo pélvico (incontinencia, prolapso).

Tamara Rial y Piti Pinsach, de España, mientras trabajaban junto a Marcel, reconocieron la necesidad de crear un programa de acondicionamiento físico que ayudara a la prevención y al restablecimiento de la salud pélvica, más allá del ámbito clínico. Esta técnica hipopresiva se ha convertido en mucho más que una técnica limitada a las personas con disfunción del suelo pélvico.

El entrenamiento hipopresivo ha evolucionado hasta convertirse en un programa de acondicionamiento físico a baja presión que utilizan tanto hombres como mujeres de todas las edades que buscan no sólo restablecer su salud pélvica, sino entrenar la verdadera función de su núcleo. A diferencia de los enfoques tradicionales de la salud pélvica y el ejercicio del tronco, en los que el enfoque y/o la atención se centran en un segmento del tronco a la vez, el programa Hypopressive – Low Pressure Fitness aborda la verdadera esencia del “tronco” para que funcione de forma sinérgica según lo previsto.

Beneficios del ejercicio hipopresivo

Después del cuarto correo electrónico, tuit y mensaje directo relacionados con los Hipopresivos que me llegaron en un día la semana pasada, decidí que era hora de escribir un blog. Me han preguntado sobre los Hipopresivos tanto en privado como a través de las redes sociales, pero desgraciadamente, como la mayor parte de la información está en español, he tenido un éxito muy limitado al intentar comprender bien la metodología exacta. El sitio web en inglés http://hypopresives.com/) ayudó un poco, sin embargo está muy mal traducido hasta el punto de que algunas de las explicaciones no eran claras desde un marco médico, musculoesquelético o neuromuscular. A pesar de mis propias dificultades para entender el material, y supongo que no soy la única con mi capacidad monolingüística, me ha alarmado la promoción de la técnica a través de los blogs y las redes sociales de entrenadores principalmente pre y postnatales como la próxima gran cosa para la disfunción pélvica, específicamente para el prolapso de órganos pélvicos. Algunos de estos blogs y publicaciones han mezclado y utilizado incorrectamente la terminología y los conceptos. ¿Quizás esto revele sus propios intentos de descifrar la barrera del lenguaje? Sin embargo, lo que me preocupa es que el público objetivo de estos blogs es la gente común, principalmente mujeres desesperadas que harán cualquier cosa para resolver los problemas de salud pélvica. Hasta que no lo entendamos mejor, creo que debemos proceder con cautela, sobre todo antes de alabarlo ante el público en general.

Ejercicio hipopresivo antes y después

La gimnasia abdominal hipopresiva (GAH) es un sistema que está diseñado para ayudar a tonificar los músculos abdominales, el suelo pélvico y los estabilizadores de la columna vertebral ofreciendo resultados que difícilmente pueden ser mejorados por otros métodos de entrenamiento, como los tradicionales ejercicios de abdominales.

Pero los entrenamientos de abdominales hipopresivos no sólo ofrecen beneficios estéticos, sino que también ayudan a corregir desequilibrios en la postura de la espalda, a mejorar la incontinencia urinaria, a evitar hernias abdominales, a mejorar la recuperación tras el parto o incluso a ayudar en problemas relacionados con la disfunción sexual, entre otros beneficios.

La respiración es el eje principal de la sesión cuando se trata de ejercicios hipopresivos, que ayudan a activar los músculos que estabilizan toda la parte lumbar y abdominal del cuerpo. Por eso, antes de describir los ejercicios, Marta explica cómo hay que respirar en cada posición:

“Antes de cada ejercicio, hay que inspirar y espirar 3 veces de forma relajada. Debes inspirar durante 2 segundos y espirar durante 4 segundos. La última vez que exhales, asegúrate de que tus pulmones están completamente vacíos y mientras aguantas la respiración, las costillas se abren como si quisieras respirar, lo que hará que tus abdominales se hundan. Intenta mantener esta posición durante 10 segundos para luego inspirar y espirar y repetir cada ejercicio hasta 3 veces. En función de tu progresión, puedes aumentar el tiempo que aguantas la respiración y el número de repeticiones”.

Ejercicios hipopresivos suelo pélvico

Si has vivido plenamente, has trabajado duro, has amado y has formado una familia, tu cuerpo puede llevar las cicatrices, desde un dolor de espalda hasta una hernia, pasando por un suelo pélvico débil o incluso un prolapso de órganos pélvicos. Estas cicatrices pueden frenarte. Pueden impedirte hacer ejercicio, divertirte con tu familia o incluso hacer cosas cotidianas como correr para coger el autobús o coger a tu hijo cuando se cae.

Los ejercicios hipopresivos son una serie de ejercicios, posturas y técnicas de respiración que se integran perfectamente en una rutina corta y fluida que es muy fácil de incorporar a tu día a día.    Se trata de un entrenamiento del núcleo, el suelo pélvico y la postura del siglo XXI.

Todo el mundo puede beneficiarse de los hipopresivos, ya que se trata de volver a entrenar los músculos del tronco para que funcionen tal y como fueron diseñados. Sin embargo, pueden ser especialmente útiles para los siguientes grupos:

El término “HIPOPRESIVO” se refiere a la disminución o reducción de la presión, mientras que la mayoría de los ejercicios tradicionales, incluidos los ejercicios abdominales, son HIPERRESIVOS, es decir, aumentan la presión interna de nuestro cuerpo. Lo que ocurre con la presión es que encontrará tu punto más débil. Por eso la presión causada por una lesión, un entrenamiento excesivo o el hecho de tener un bebé puede provocar incontinencia urinaria, hernias e incluso prolapso de órganos pélvicos. Y a menudo las técnicas de ejercicio tradicionales no pueden ayudar, porque dependen de la contracción muscular consciente.