Dolor de lumbares y piernas

Dolor en la parte baja de la espalda y los muslos covid

La mayoría de la gente sabe lo que significa la ciática: un dolor en la parte baja de la espalda que se irradia hacia abajo, hacia el glúteo izquierdo o derecho, hacia la pierna y, a veces, hasta el pie. En algunos casos, el dolor puede ser insoportable y, aunque sea difícil de creer, la ciática suele desaparecer en 3 meses con un tratamiento conservador. Ese “tratamiento conservador” al que nos referimos aquí son terapias no invasivas que se pueden realizar en la comodidad de su propia casa.

Las 5 terapias caseras para la ciática que se indican a continuación son buenas opciones para las personas que han comenzado a experimentar recientemente el dolor del nervio ciático o cuyo dolor no es grave, pero le insto a obtener la aprobación de su médico antes de probar cualquiera de estos tratamientos caseros. Si llevas varias semanas con ciática o tienes un dolor debilitante en la parte baja de la espalda y en las piernas, deberías consultar a tu médico.

Puede parecer poco natural hacer ejercicio cuando se tiene dolor, pero las investigaciones sugieren que descansar demasiado puede agravar los síntomas de la espalda y las piernas. En su lugar, incorpora ejercicios suaves a tu día a día para aliviar la ciática. La clave está en la suavidad: El ejercicio no debe ser doloroso ni extenuante. Un paseo alrededor de la manzana (sí, ya sé que no es en casa, pero está lo suficientemente cerca) es un gran ejemplo de actividad física que mantiene su columna vertebral fuerte sin hacer ningún daño adicional. Además de fortalecer la columna vertebral (por ejemplo, los ejercicios para el tronco, una columna vertebral más fuerte protege mejor contra el dolor), el ejercicio desencadena la liberación de endorfinas para reducir la percepción del dolor.

Ciática

Dolor sordo y punzanteEl dolor que permanece en la parte baja de la espalda (dolor axial) suele describirse como sordo y punzante en lugar de ardiente, punzante o agudo. Este tipo de dolor puede ir acompañado de espasmos musculares leves o intensos, limitación de la movilidad y dolores en las caderas y la pelvis.

Dolor que se desplaza a las nalgas, las piernas y los piesA veces el dolor lumbar incluye una sensación aguda, de escozor, hormigueo o entumecimiento que baja por los muslos y llega a la parte baja de las piernas y los pies, también llamada ciática. La ciática está causada por la irritación del nervio ciático, y normalmente sólo se siente en un lado del cuerpo.

Dolor que empeora después de estar sentado durante mucho tiempoSentarse ejerce presión sobre los discos, lo que hace que el dolor lumbar empeore después de estar sentado durante mucho tiempo. Caminar y estirarse puede aliviar el dolor lumbar rápidamente, pero volver a la posición sentada puede hacer que los síntomas vuelvan a aparecer.

Dolor que mejora al cambiar de posiciónDependiendo de la causa subyacente del dolor, algunas posiciones serán más cómodas que otras. Por ejemplo, en el caso de la estenosis espinal, caminar con normalidad puede resultar difícil y doloroso, pero inclinarse hacia delante sobre algo, como un carrito de la compra, puede reducir el dolor. La forma en que los síntomas cambian con los cambios de posición puede ayudar a identificar el origen del dolor.

Dolor en la parte posterior de la pierna

El dolor de espalda puede variar en intensidad desde un dolor sordo y constante hasta un dolor repentino, agudo o punzante. Puede comenzar repentinamente como resultado de un accidente o por levantar algo pesado, o puede desarrollarse con el tiempo a medida que envejecemos. Hacer muy poco ejercicio seguido de un entrenamiento extenuante también puede causar dolor de espalda.

La parte baja de la espalda -donde se producen la mayoría de los dolores de espalda- incluye las cinco vértebras (denominadas L1-L5) de la región lumbar, que soportan gran parte del peso de la parte superior del cuerpo. Los espacios entre las vértebras se mantienen gracias a unas almohadillas redondas y gomosas llamadas discos intervertebrales que actúan como amortiguadores en toda la columna vertebral para amortiguar los huesos cuando el cuerpo se mueve. Unas bandas de tejido conocidas como ligamentos mantienen las vértebras en su sitio, y los tendones unen los músculos a la columna vertebral. Treinta y un pares de nervios están arraigados a la médula espinal y controlan los movimientos del cuerpo y transmiten señales del cuerpo al cerebro.

La mayoría de las lumbalgias agudas son de naturaleza mecánica, lo que significa que hay una alteración en la forma en que los componentes de la espalda (la columna vertebral, los músculos, los discos intervertebrales y los nervios) encajan y se mueven. Algunos ejemplos de causas mecánicas del dolor lumbar son:

Dolor lumbar e hinchazón de piernas y pies

La ciática es un dolor punzante que comienza en la parte baja de la espalda, se irradia a la nalga y baja por la parte posterior de una pierna. El dolor suele estar causado por la presión ejercida sobre el nervio ciático por una hernia discal, espolones óseos o una distensión muscular (Fig. 1). Usted desempeña un papel importante en la prevención, el tratamiento y la recuperación del dolor de piernas. Suele mejorar con reposo, fisioterapia y otras medidas de autocuidado. El dolor crónico puede mejorarse con cirugía.

Figura 1. El nervio ciático está formado por los nervios espinales L4 a S3. Los dos nervios ciáticos recorren la pelvis y bajan por la parte posterior de cada pierna. Cada nervio se divide en un nervio peroneo y otro tibial para proporcionar la sensibilidad y el control muscular de las piernas y los pies.

El dolor ciático agudo se produce de forma repentina y suele curarse en varios días o semanas. La gravedad está directamente relacionada con la magnitud de la lesión tisular. El origen del dolor puede estar en las articulaciones de la columna vertebral, los discos, los nervios o los músculos y ligamentos.

El dolor ciático crónico persiste durante más de 3 meses y su origen puede ser difícil de determinar. El dolor crónico puede sentirse todo el tiempo o empeorar con determinadas actividades. Entre los factores que contribuyen a este dolor se encuentran las lesiones nerviosas, la cicatrización de los tejidos, la artritis o los efectos mentales del dolor. Las personas con síntomas crónicos pueden ser remitidas a un especialista en dolor (véase Tratamiento del dolor).